Pági­nas: 274 Edi­to­r­i­al: Plaza & Janés ISBN: 9788401474682

Sinopsis

Charles Deck­er es un ado­les­cente de 18 años que sufre de esquizofre­nia, al que quieren internar en un cor­rec­cional por agredir a un pro­fe­sor con una llave ingle­sa, provocán­dole un grave trau­ma­tismo craneal. Pis­to­la en mano, y para que no lo encier­ren, secues­tra a su clase toda una mañana. Para que la situación sea más lle­vadera Charles les cuen­ta parte de su infan­cia y su ado­les­cen­cia; mien­tras, el ambi­ente empieza a caldearse entre los alum­nos, y pron­to comien­zan a atacarse ver­bal y físi­ca­mente, con­ta­gia­dos de la demen­cia de Charles.

Opinión

Un libro descat­a­lo­ga­do. Veta­do por el pro­pio King porque su his­to­ria sirvió para que var­ios ado­les­centes con algún ver­a­no de caren­cia imi­taran la his­to­ria en sus respec­tivos cole­gios. El primer libro que escribió este genio, aunque no fue el primero que pub­li­caron las edi­to­ri­ales de él. ¿Qué más se puede pedir? ¡Había que leer­lo!

Una vez más, y nada más comen­zar, he de recono­cer­le el méri­to a este autora­zo, y quitarme el som­brero ante él. Yo de él no hubiera reti­ra­do del mer­ca­do este libro, porque me parece un buen tra­ba­jo y un libro que merece la pena ser leí­do; que haya quien por leer un libro le ven­gan ideas psicó­patas a la cabeza y las quiera pon­er en prác­ti­ca… pues me dis­cul­parán, pero la cul­pa no es del libro; si no hubiera sido por el libro hubiera sido por cualquier otro pre­tex­to.

En este libro nos mete­mos de lleno en la mente de Char­lie Deck­er: un joven un tan­to per­ju­di­ca­do de la cabeza, que para ven­garse del mun­do toma a una clase de su insti­tu­to de rehén a pun­ta de pis­to­la. Durante el secue­stro, y a modo de con­ver­sa­ciones con los alum­nos y parte del per­son­al del cen­tro, vamos pro­fun­dizan­do en su vida y en qué le ha lle­va­do a ser como es y a estar hacien­do lo que está hacien­do.

El gran méri­to de King en este libro no es con­stru­ir una his­to­ria de ter­ror sino con­stru­ir un per­son­aje, el de Char­lie, y dotar­lo de una vida tan tur­bia pese a su cor­ta edad que tú mis­mo llegues a empa­ti­zar con él de modo que pue­da lle­gar a pasársete por la cabeza que sí, que está mal lo que está hacien­do y que no debería ocur­rir, pero tam­bién que con­forme se lo han hecho pasar, y con lo que le ha toca­do vivir, pues como para no haber acaba­do loco.

Lle­ga un pun­to en la his­to­ria en que hay una serie de suce­sos involu­cran­do direc­ta­mente a uno de los per­son­ajes: Ted Jones, que durante toda la his­to­ria se nos ha pre­sen­ta­do como el «ene­mi­go» de Char­lie en el aula secuestra­da. Real­mente no entendí cuál es el det­o­nante para que suce­da eso, pero ahí que­da.

El final de esta his­to­ria, pues como no podía ser de otra man­era: es un final triste; por mucho que haya con­segui­do que empat­ice­mos con Char­lie, al final estas cosas deben ter­mi­nar como ter­mi­nan.

En resumen: un buen libro, ágil de leer y muy entretenido. Recomend­able, siem­pre y cuan­do no este­mos locos y pense­mos que no sería mala idea pon­er en prác­ti­ca lo apren­di­do.