Reseña: El bosque de los inocentes, de Graziella Moreno
2-II-2016

El bosque de los inocentes, de Graziella Moreno
Páginas: 368 ISBN: 9788477028017
Comprar: papel ebook Editorial: Grijalbo ficha del libro
Sinopsis
Iris ha vuelto a tener el mismo sueño que la desvela cada noche, del que esta vez ha despertado con un grito de terror. Ese mismo día decide aceptar la invitación de su tía a pasar el fin de semana en el pueblo al que iba de pequeña, cuyo recuerdo está bañado por la luz de los veranos de la infancia, las reuniones familiares y los juegos junto al pozo y en el bosque. Allí podrá olvidarse de los casos del bufete, de los mil y un problemas y de Barcelona. Y sobre todo, eso espera, podrá descansar y dormir de un tirón.
Entretanto Carlos, cabo de los Mossos d’Esquadra, estudia el plano del parque natural en el que se encuentra enclavado Rocablanca, mientras organiza las tareas del equipo de búsqueda. Tiene un mal presentimiento, en otoño los días se acortan y el tiempo corre en su contra.
Solo entrar en la plaza del pueblo, Iris se fija en una pancarta: «Vamos a encontrar a Julián». De pronto un coche embiste el suyo por detrás. Cuando el conductor, un forastero instalado en un viejo caserón restaurado, baja para disculparse y le estrecha la mano, a ella se le eriza la piel. Esa misma noche vuelve a soñar.
Pronto se verá envuelta en una investigación criminal que da nuevo sentido a las pesadillas de las que quería huir. Hay vidas de inocentes que dependen de que deje de darles la espalda y empiece a investigar en sí misma, en su pasado y en lo que está sucediendo en Rocablanca.
El bosque de los inocentes… Para Iris es un refugio; para él, un escondite.
Opinión
La monótona vida de Iris está a punto de cambiar. Un sueño recurrente la atormenta cada noche; en él se ve a sí misma en un bosque en el que ve cosas poco agradables aunque lo que es mucho peor es la sensación con la que se queda cuando despierta sobresaltada y se ve a sí misma, esta vez ya despierta, en su propia cama agonizando. De pequeña recuerda que tenía sueños premonitorios, pero durante los diez años en los que estuvo casada con su ex, Sergio, todos esos sueños habían desaparecido de repente. Todo cambia para ella cuando un día, durante una visita a Rocablanca —el pueblo al que iba frecuentemente de pequeña— para ver a su tía Dalia, se adentra en el bosque del Parque natural del Montseny donde tan feliz había sudo durante su infancia, y se topa con el mismo lugar que había visto en su sueño. Y lo peor de todo es que ocurre exactamente lo mismo que ocurría en su sueño.
En general me ha parecido una buena lectura; entretenida, que es lo que cuenta. Y con un fuerte componente de intriga que te hace pensar durante la práctica totalidad que el imitador del asesino es alguien que no es; y que al menos yo no lo he visto venir hasta que no lo tenía delante de mis narices.
Características
El libro está dividido en tres partes, cada una de ellas encabezada por una cita de conocidos autores; estas partes están separadas por breves capítulos que, por norma general, indican el cambio de escenario y de narrador entre todas las tramas que contiene la historia. La novela da comienzo relatando un sueño que se volverá recurrente en el transcurso de la historia. Acto seguido, y en orden lineal, toma el relevo una narración múltiple en primera persona guiada de la mano de Iris, la protagonista de la historia en la trama principal; de Carlos, un personaje secundario que encarna a un cabo de los Mossos d’Esquadra; y de Christian, el empleado y la persona que hace el «trabajo sucio» al imitador de Gilles de Rais. La historia está ambientada en dos escenarios principales: en Barcelona, donde se centra la vida diaria de Iris; y en Rocablanca, un pequeño pueblo junto al Parque natural del Montseny, que puede ser considerado el hábitat de susodicho imitador. La caracterización de todos estos personajes es indirecta ya que la narración sólo transcribe pensamientos de los mismos y no características físicas o psicológicas de ellos.
Personajes
Esta es mi selección de los personajes que considero más importantes:
Iris, la protagonista de esta historia, es una joven divorciada, abogada de profesión, a la que un día le llega un caso curioso: un cliente que se enfrenta a pena de cárcel y que parece no arrepentirse de lo que ha hecho para terminar en esa tesitura. Y como no tiene suficiente trabajo en la oficina, van saliéndole extras por ahí. Como ya dije: tiene sueños premonitorios, que cuando no sabe qué pueden significar acude en ayuda de su psicóloga Berta para que intente ayudarla de algún modo; muchas veces no terminan por descubrir de qué puede tratarse, pero en otras ocasiones son sueños más claros que le dejan ver claramente cosas… no demasiado buenas… que pasarán.
Y precisamente en esos sueños no demasiado buenos a los que hago referencia es donde entran en escena, entre otros, Carlos y Jordi: dos agentes de los Mossos d’Esquadra que tienen un trabajo bastante agotador durante toda la historia; son dos de los encargados de resolver los casos con los que, en cierto modo, sueña Iris. Dado que la zona donde transcurren los hechos es un tramo de bosque dentro del parque natural del Montseny la búsqueda se les complica bastante dada la extensión y lo abrupto del terreno, por lo que en muchos casos se narra más bien la frustración de no poder avanzar que lo que es la búsqueda en sí.
El personaje de Gabriel Sira me ha gustado mucho. Y no sé, pero intuyo, por la forma en que está construido, que a Graziella Moreno también le ha gustado mucho haberlo creado; y poner nuestra mente a prueba, por qué no decirlo. Vale que es un hombre es raro, vale que semejante nivel de excentricidad no lo convierte en el candidato ideal para confiar a primera vista en él, pero qué le voy a hacer, debo ser un pelín sapiosexual y, cuanto menos, siento profunda admiración por las personas inteligentes; y un personaje como éste, que encarna al prototipo de hombre elegante, con modales exquisitos, y que muestra una profunda inteligencia me gusta un montón.
Christian es un hombre antipático, desastrado, maloliente, con una personalidad cuanto menos deficiente y con una moral lo suficientemente ligera como para que no le ponga alerta cuando está haciendo algo terriblemente mal si en compensación hay una buena suma de dinero. Es el empleado del imitador de Gilles de Rais, el que le hace el trabajo sucio, y que aparte de lo que de por sí le paga su jefe aprovecha para lucrarse todavía más por su cuenta aprovechando la ocasión. Viendo cómo es este tipo ya podemos hacernos una idea de cómo será su jefe. Que no diré quién es, porque quiero que sea sorpresa para todo el que sea la novela, como lo fue para mí.
Pros y contras
Quiero destacar un gran pro que, para mí, tiene esta historia, y es que no ocurre, como suele ser habitual, que la persona que tiene premoniciones de algún tipo por arte de magia resuelva el caso sin más, la policía para casa y esa persona a celebrarlo con un copazo. En este caso, digamos que está por ahí, pero la policía hace lo que le pagan para hacer.
Un contra, que aunque para mí no lo haya sido puede que haya para quien sí lo sea: las narraciones históricas. La autora, en boca de Alma, una amiga de Iris, aprovecha para profundizar brevemente en la historia y darnos a conocer al asesino Gilles de Rais y el mundo que lo rodeaba: por qué hacía lo que hacía, cómo lo hacía, de quién se rodeaba para que nunca lo pillaran, etc; y también, en boca de una tía de Iris que vive en los Pirineos, profundiza en un episodio histórico que afecta a las dos familias más ricas del pueblo donde viven: Rocablanca. A mí me ha gustado, me ha parecido entretenido, pero quizá puedan ser las partes un pelín más densas.
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Lo importante es celebrarlo con un copazo. Todo. Siempre. Y bien cargado.
Por desgracia estoy un poco saturada de suspense y novela negra, creo que me voy a tomar un tiempo y leerle algún libro “fresquito para el verano”, de esos que dicen.
leeré*
Después de Génesis necesitaremos un periodo de adaptación al mundo real, ¿no? Jajaja. ¡Ya me contarás por cuál te decides! Un beso.